viernes, diciembre 23, 2005

La cara femenina de los hombres

Veinte hombres se confiesan

No todos los hombres reconocen tener un lado femenino, aunque los 20 encuestados por Magazine sí lo confiesan. El estereotipo de hombre rudo y varonil que trae el jornal a casa ya no se corresponde con la realidad: los varones piden baja por paternidad, usan cosméticos y ya no ocultan sus sentimientos.

El bailaor Joaquín Cortés encubre su lado femenino y confiesa que se ha criado en un entorno muy machista.


Usted se califica a sí mismo de machista.

—La cultura gitana es machista. Yo no me lo he inventado.

—¿Qué entiende por machista?

—Pues moro.

—¿Y qué entiende por moro?

—El hombre que domina a la mujer, la tiene en un segundo plano, impide su independencia... Mi lado machista está ahí, lo he mamado y no lo puedo borrar de la noche a la mañana. Yo nunca me he metido en la cocina ni he puesto la mesa porque en casa eso lo hacían las mujeres... Entiendo que la mujer ha llegado al siglo XXI sin los tabúes de antaño, pero una cosa es hablar y otra hacer. Mentiría si me diera el pego de moderno y ahora dijera que soy feminista. ¡Si no sé freír un huevo! Tengo buenas intenciones, eso sí. Creo que poco a poco cambiaré.

Quien así hablaba, en una entrevista concedida a El Mundo, era Joaquín Cortés. El artista nos prestó, sin saberlo, una magnífica imagen para el propósito de este reportaje: descubrir si los varones españoles, como él, están cambiando. Si se están introduciendo en territorios que hasta ahora eran exclusivos de las féminas. Si al tiempo que la mujer ha invadido sus dominios —el laboral, por ejemplo—, ellos han hecho también incursiones de conquista en las regiones que teóricamente correspondían a la mujer.

Un vistazo al diccionario. Masculino: "Varonil, enérgico". Femenino: "Que posee los rasgos de la feminidad. Débil, endeble". Éstas son las únicas aclaraciones que ofrece la Real Academia de la Lengua sobre lo que, supuestamente, distingue a los 21.285.247 españoles de las 21.912.437 españolas… más allá del sexo. Pero luego, si uno se interesa en buscar la voz "feminidad", de esos rasgos que la caracterizan no se dice nada, mientras que por varonil, en una de sus acepciones, se entiende "esforzado, valeroso y firme".

Defensores de su lado femenino

Una cuestión educacional, biológica, sensitiva... Estos 20 conocidos encuestados descubren y explican a Magazine qué aprecian más de esa vertiente, cómo se manifiesta en ellos, y las ventajas que tiene a la hora de las relaciones sociales.

El talento
Santiago Álvarez de Mon

Experto en gestión empresarial y profesor del IESE, ha escrito, entre otros libros, “La lógica del corazón”.
“No tengo ninguna vergüenza de mi lado femenino sintiéndome y sabiéndome hombre. Cuando reivindico una empresa sensible, placentera, donde el capital humano pueda descorchar su talento, eso no sé si será mi lado femenino –porque creo que sería injusto atribuírselo en exclusiva a la mujer–, pero probablemente esté actuando la parte de mi cerebro más empática, y espero que se haya nutrido de las mujeres con las que me he relacionado”.

Sensibilidad
Sergi Arola
Restaurador.
“El que diga que no tiene lado femenino es un orangután. Desgraciadamente la sociedad en la que nos hemos criado nos lleva a contemplar valores que se pretende que implican ‘debilidad’ como femeninos, cuando son valores humanos. Si el hecho de tener sensibilidad estética o de que quiera estar con mis hijas, si eso es femenino, pues entonces sí lo soy. Pero pienso que si queremos avanzar tenemos que identificar estas cosas como valores humanos, no femeninos o masculinos. Es muy injusto tanto por parte de la mujer que se los apropia como del hombre que los tacha de debilidad”.

La intuición
David F. Cantero
Presenta el telediario de fin de semana en TVE y acaba de publicar su primera novela, “Amantea” (RBA).
“Afortunadamente tengo lado femenino. No es nada incompatible con la masculinidad. Es algo difícil de explicar, es un añadido, una posibilidad más, una facultad extra y muy femenina a la hora de observar el mundo, de afrontar la vida, la paternidad, el amor, el sexo. Tal vez se nota en una mayor intuición, en una carga añadida de sagacidad, en un particular toque a la hora de emplear la inteligencia, el sentido común. Siempre he pensado que las mujeres son superiores”.

La ternura
Eudald Carbonell

Codirector del proyecto Atapuerca.
“Por supuesto que tengo esa parte. La forma de ser del macho deriva de la forma en que te educa la hembra, como madre, y la abuela como la madre de las madres. Lo femenino se manifiesta cuando mantenemos nuestra capacidad de entender lo que nos rodea de manera abierta. En la capacidad de generar ternura en la especie. En la voluntad de entender que la complementariedad sexual es posible porque los machos tenemos un lado femenino y las hembras un lado masculino”.

Creatividad
Pablo Carbonell

Cantante y actor. Este mes estrena en el teatro Lara de Madrid “La curva de la felicidad”.
“Es mi lado creativo, sensible, solitario, ‘sureño’. Mi lado masculino, en cambio, es limpiar la casa, hacer la comida; soy muy ‘maruja’, pero eso es lo que entiendo como mi lado masculino, no femenino. Por ejemplo, cocinar es ahora cosa de hombres, las mujeres no se dan cuenta de lo que han perdido. En general, en todos esos problemas que piensas que puedes solucionar con ternura, ese creo que es mi lado femenino”.

Humanidad
Fernando Colomo Director de cine y guionista.
“Algunos tienen una tendencia a ocultar su parte femenina, a ser muy duros, que es algo que se aplica erróneamente al lado masculino, cuando hay mujeres muchísimo más duras. Pero ese lado femenino es casi más humano. Parece que el hombre está destinado a producir y la mujer a soportar las situaciones, al papel de víctima, en cierto sentido, a ser más constante... Pienso que a veces es una limitación ver ciertos temas desde una sola perspectiva. Y en lo familiar, también saco mi lado femenino, aunque no me dejen cocinar porque dicen que ensucio mucho la cocina...”.

Ser persona
Pau Donés Cantante, líder de Jarabe de Palo.
“No sé si lo tengo o no. Pero es que hablando de mujeres y de hombres estamos hablando de personas. Con rasgos diferentes, pero que seguro que se encuentran, que tienen algo en común. Y eso sí, creo que los roles han cambiado muchísimo. Cada vez somos más personas y tenemos necesidad de realizarnos como tales. Lo que nos hace hombres y mujeres son una serie de rasgos físicos, componentes hormonales y quizá una cierta organización mental más o menos diferente. ¿Qué puede ser en mi caso? ¿Que me guste darle un beso a un amigo mío? Yo creo que eso no es femenino, es una demostración de cariño, como persona”.

Su mundo
Jorge Drexler
Cantautor.
“Todos los hombres tenemos un lado femenino. Está en cada uno querer verlo o no. A mí me interesa ver el mío; me interesa como contrapeso a mi masculinidad. No me gustan las generalizaciones ni los estereotipos en general. Tiendo a desconfiar de características exclusivas de tal o cual género, aparte de las biológicas, claro está. Pero he escuchado decir muchas veces que mis canciones y mi estilo interpretativo tienen un lado femenino. No lo sé. Me interesan mucho las mujeres, con su mundo cíclico, en fase con el planeta”.

El diálogo
Iván Espinosa de los Monteros

Responsable de Desarrollo de RocíoMonasterio Asociados. Economista.
“No soy políticamente muy correcto, así que diría que no, aunque sí he adquirido alguna cualidad que yo veo como femenina... Lo que sí he aprendido, trabajando con mujeres, es a no restringir la relación comercial, de diálogo, que se establece en el terreno de lo profesional a una pura transacción, a profundizar en la relación personal. Me parece que las mujeres inciden en eso y sacan mayor provecho. En lo personal, el equilibrio entre familia y trabajo lo hemos buscado más desde que mi pareja y yo trabajamos juntos”.

Su visión
Carlos Goñi Zubieta
Doctor en Filosofía y escritor. Autor de “Alma femenina” (Espasa).
“En todo hombre hay un alma femenina y en toda mujer un alma masculina. Si no, no podríamos entender al otro. El mundo no es simplemente masculino, como lo hemos hecho hasta ahora. Creo que en mi caso se manifiesta en ese entender mejor a las mujeres, en que intento ver la realidad con ojos que no son los míos. Los hombres vemos el mundo muy gris, fosilizado, mientras que la mujer lo ve más dinámico. Las mujeres tienen cosas que a nosotros nos cuestan, por ejemplo, el atender a los detalles y el estar más por las personas, puesto que nosotros estamos más por las ideas que por las personas”.

El intelecto
Óscar Jaenada
Actor. Su última película es “Camarón”, de Jaime Chávarri.
“Sí, claro que sí tengo esa parte. No sólo por cuestiones ‘femeninas’, como la coquetería o el gusto por el orden, sino que tiene que ver con otros aspectos, con la tranquilidad, por ejemplo, o con el entendimiento de las cosas. Aunque es verdad que es difícil ver el lado femenino de un hombre, a no ser que sea afeminado. En mi caso, ese lado femenino no es muy destacable, muy patente, sino más intelectual. Creo que mujer y hombre sacamos conclusiones diferentes. Me considero femenino en la forma de intentar entender ciertas cosas. Eso amplía el campo, las posibilidades de comprender lo que te rodea”.

La vivacidad
Enrique Loewe
Presidente de la Fundación Loewe.
“No sólo la tengo, sino que además cultivo mi parte femenina. Intento imitar y desarrollar lo que admiro de lo ‘femenino’. Creo que es una actitud general, en todos los campos. No podría ser de otra forma, porque en primer lugar, tengo un ‘cinegeo’, mis tres hijas, y en la empresa siempre ha habido un componente femenino en gran abundancia; toda una escuela de vida. Esa agilidad, esa vivacidad, esa intuición y ese sentido práctico que he observado en las mujeres son virtudes que admiro y practico”.

La igualdad
Álvaro de Marichalar
Empresario y navegante.
“Yo no hago ninguna diferenciación entre masculino y femenino. Hay personas, simplemente. Las mujeres no son más sensibles ni más inteligentes. Los hombres no son más sensibles, ni más inteligentes. La mujer tiene que asumir su ser persona completo, los derechos y las obligaciones, algo que no ocurre en España. Una mujer no debería dejarse invitar nunca por un hombre, porque eso es una forma de compra que viene de una tradición que se basaba en que la mujer era inferior. No estoy nada de acuerdo con que yo tenga que conquistarlas. Hacer la primera llamada, por ejemplo. No hay que conquistar, en todo caso, la conquista es mutua”.

Detallismo
Enrique Rojas
Catedrático de Psiquiatría y escritor.
“La condición humana tiene aspectos masculinos y femeninos, lo que ocurre es que en el hombre están soterrados. El ‘alma femenina’ tiene en Occidente unos rasgos que se han desdibujado, como son una sensibilidad especial hacia lo psicológico, una mayor atención por los detalles, una especial captación estética o una mayor inclinación a lo afectivo. Todo esto, que es tradicionalmente femenino, se oculta en el hombre y se hipertrofia en el plano de la mujer”.

La dualidad
Fernando Sánchez Dragó
Escritor.
“Todos los hombres lo tienen, pero muchos no lo perciben. Lo mismo sucede, a la inversa, en el caso de las mujeres (aunque muchas de estas, ahora, en el mundo occidental están haciendo todo lo posible para aplastar e ignorar su lado femenino. Eso las conduce a la neurosis permanente). Necesitaría un libro para explicarme. Diré sólo tres cosas: 1. Me gusta ser ama de casa : limpiar, barrer, regar, fregar. 2. Me gusta sentir en el sexo lo que sienten las mujeres. Adopto a menudo, solo en la cama, el papel femenino (también el masculino, por supuesto). Llego, incluso, a ponerme, sólo para follar, lencería de mujer. 3. Busco, como Leonardo, el Androgino, que nada tiene que ver con el Hermafrodita”.

Seducción
Gonzo Suárez
Presidente de Arvirago Entertainment y responsable de “Commandos”, el tercer videojuego más vendido en el mundo en 1998.
“La división entre valores femeninos y masculinos responde a que, como mente organizada, necesitamos clasificar las cosas. Creo que si los comportamientos tradicionalmente atribuidos a la mujer los está asumiendo más el hombre, esto es fruto de la sociedad de consumo. Hay una crisis generalizada de papeles. Eso del hombre metrosexual no es más que un invento literario, pero refleja el hecho de que el hombre usa armas de seducción que han sido asignadas a la mujer. ¿Mi lado ‘femenino’? Lo utilizo cuando tengo que imaginar qué cosas le gustan a mi oponente sexual para la seducción”.

Imaginación
Antonio Tapia
Doctor en Medicina y Cirugía Estética.
“Biológicamente no hay ninguna duda: somos una mezcla del componente masculino y femenino. Aunque el porcentaje es difícil de determinar. Yo lo veo clarísimo: si no tienes un concepto especial de la estética difícilmente te puedes dedicar a mi profesión. Existe una relación muy importante con una forma de vivir la belleza. Si no tienes esa parte femenina de amor a la belleza, que creo que se da especialmente en la mujer, es imposible dedicarte a lo que yo me dedico. En cirugía estética tienes que tener lo que yo llamo ‘golpe de imaginación’, esa capacidad de ver qué le puede ir bien a una persona, cómo puede ser, y este imaginarse el futuro creo que es más característico de lo femenino”.

Costumbres
Mario Vaquerizo
Periodista. Actualmente es representante de Fangoria y Elsa Pataky.
“Para mí supone el tener un comportamiento enteramente heterosexual con mi chica y no por ello no reconocer que soy adicto a la mesa camilla, la prensa rosa, el verme más guapo con el ojo maquillado de negro, cuidarme el pelo, hablar en diminutivo, compartir muchas amistades femeninas y admirar la belleza física de hombres como Joe Dallesandro o Tommy Lee. Incluso rechazar la proposición de alguna chica porque no es de mi agrado 100%”.

Disposición
Juan y Medio
Presentador.
“No es que yo lo crea. Es que está empíricamente demostrado que todos los hombres lo tenemos. Lo que ocurre es que unos lo potencian y otros no. Y yo lo procuro. En una emotividad más compleja. En que intento tener una mayor variedad de sentimientos. En la capacidad de sacrificio. Y en tener en todo momento muy claro que soy inferior, y que para equipararme a ellas tengo que ser más mujer. Nos iría mejor, en todo, si los hombres tuvieran más disposición de mujer. El siguiente paso evolutivo del hombre es cuando sea mujer”.

Su “curro”
Alejandro Zaera-Polo
Director del estudio Foreign Office Architecs.
“Creo que es muy difícil sostener que uno tiene un único género. La parte más sensible, más paciente, son los rasgos que yo diría que son más ‘femeninos’ de mi personalidad. En lo profesional, es parte de la ética de la oficina que el desarrollo de proyectos no sólo responda a la voluntad de la directiva, sino que es un proceso de ‘edición’ de posibilidades, de ideas, que surgen desde abajo. Las ideas se van criando, se crían, no se imponen, algo más ligado a esa sensibilidad femenina. Creo que todas las empresas modernas han adoptado ese modelo de trabajo”.

El Mundo.es - Suplemento: Magazine
Setiembre 2005